- Sabiendo que su nombramiento como “Encargado del Despacho de la ASEN por Ministerio de Ley” era totalmente ilegal, se dedicó a realizar auditorías, firmar documentos, ejercer dinero público y un sin número de ilegalidades bajo la protección y amparo de Polo Domínguez y Toño Echevarría García.
Desde que tomó el cargo en la Auditoria Superior del Estado de Nayarit, la ASEN, el “honorable y respetado” ahora Notario 42, Héctor Manuel Benítez Pineda, coloquialmente conocido como “El Chino Benítez”, él sabía que su nombramiento de “Encargado del Despacho de la ASEN por Ministerio de Ley” era totalmente ilegal.
Ahora hay ya resoluciones del Tribunal de Justicia Administrativa y de jueces federales donde a varios asuntos le dan revés a la ASEN porque simplemente el nombramiento del que se decía “titular de la ASEN” era ilegal o no existía, ni mucho menos todos los que él dio a sus subalternos, como el jurídico, los auditores o las resoluciones de las revisiones que se hacían.
Y lo que ocurrió es que al “Chino” Benítez, lo nombró un Auditor Especial Financiero, no el congreso del Estado, y aunque el cargo en aquel entonces se le reconocía por los legisladores locales, lo cierto es que no era legal.
Así pues, Polo Domínguez, presidente del congreso de la pasada legislatura y el anterior gobernador, Antonio Echevarría García, confabulados, sostuvieron a Héctor Benítez para llevar a cabo sus venganzas políticas, pero, además, para que todas las revisiones que a ellos les hicieran, al momento de pelear su defensa tendrían cómo librarla atacando el nombramiento ilegal del que ellos mismos sostenían.
Ahora se sabe que todas las auditorias y revisiones que realizó la ASEN den 2017 a abril del 2020, son ilegales, y que todos esos millones de pesos fueron tirados a la basura, pero que varios dizque servidores públicos que ahí estuvieron, cometieron diversos delitos como el de Usurpación de Funciones Públicas, Ejercicio Indebido de Funciones, Peculado, Trafico de Influencias, entre otros…
Derivado de estas ilegalidades que han brotado, el ahora titular de la ASEN, Salvador Cabrera Cornejo, tiene como obligación el denunciar a su antecesor porque de no denunciarlo, Chava Cabrera Cornejo podría caer en omisión, complicidad y también en una ilegalidad.
La podredumbre que había en la ASEN apenas comenzó a brotar… falta mucho más. Esto es solo la punta del iceberg.
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