Vendedores ambulantes de Bahía de Banderas declaran no tener el apoyo por parte de inspección de PROFEPA, por lo que la competencia se vuelve desleal, ya que cualquiera que se vaya a las playas a poner a la venta un producto o souvenir lo pueden hacer sin problema.
Dicen que desde semana de Pascua no ha habido inspecciones, y que además durante las vacaciones solo se les vio recorrer al personal de la Profepa en dos ocasiones, pero no hay ningún procedimiento para proceder y revisar si los vendedores cuentan o no con permisos.
Lo cual ha interferido con la venta de los restauranteros, pues la renta de sombrillas se está volviendo tan rentable, que llegan desde muy temprano, e invaden las playas, dejando poco espacio para el comerciante local, que trae su permiso, y que además ya no puede transitar libremente, pues las sombrillas traen sus propios vendedores, que no son gente de la zona, pero tampoco cuentan con un permiso.
Además estas sombrillas, cubren a los restauranteros y no solo los clientes disminuyen, sino que es difícil acercarseles para ofrecer algún servicio o producto, y para colmo de males terminan quitando la vista a restaurantes que tienen una vida tanto en Bucerias como en la Cruz de Huanacaxtle sirviendo al turismo o al local en estas fechas que se consideran bajas.
Motivo por lo que estos comerciantes, unidos hacen la denuncia con el fin de que las autoridades atiendan estas situaciones, que esta por demás decir que están mermando el subsistir del habitante local y de sus familias, que además pagan permiso a Semarnat y al Ayuntamiento
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