La batalla por la «joya de la corona» se antoja intensa, la alcaldía de Bahía de Banderas seguramente es la más codiciada del Estado, más cuando la administración que concluye en Septiembre llevó a cabo una verdadera reingeniería financiera, que le permitió subsanar la gran mayoría de los adeudos históricos que venía arrastrando la comuna.
La dirección de la administración municipal, a cargo de Jaime Cuevas, afrontó de la mejor manera posible el socavón financiero que heredó: apretándose el cinturón y pagando.
El Doctor Cuevas, fiel a su estilo, manejó el aparato gubernamental de Bahía de Banderas con austeridad, de la buena, manejando eficientemente los recursos disponibles, sin endeudar más el Ayuntamiento, pero sin descuidar las expectativas de los bahiabanderenses.
Se ofertaron servicios públicos de calidad, la recaudación fue exitosa gracias a la certeza que se generó a partir de la desaparición del cáncer de la corrupción que estaba enquistada en la tramitología municipal, los «moches» se fueron.
Jaime Cuevas inicia en unos días más su lucha en la contienda electoral de Bahía de Banderas, anda con prisa, pero en paz, sabe que es la mejor opción para continuar con el camino hacia el Bahía de Banderas que todos queremos, aunque el Doctor NO es ‘monedita de oro’, el sentido común lo marca como una decisión inteligente.
El Doctor tiene la visión, la sensibilidad social y la certeza de qué falta hacer por el municipio, pero sobre todo, tiene claridad en el cómo.
Bahía de Banderas NO está para aventuras escandalosas, Jaime sigue…
Yo digo.
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