Ante la falta de mayor vigilancia por parte de los inspectores de reglamentos municipales de Puerto Vallarta, en el primero cuadro histórico de la delegación de El Pitillal, ya se salió de control entre las personas que ejercen informal.
Los fines de semana, mientras unos comerciantes se instalarán en las banquetas, sin importarles el paso del peatón, ni mucho menos personas que utilizan sillas de ruedas, con tal de lograr su objetivo, que vienen siendo la venta de todo tipo de mercancía.
Otros comerciantes, estacionan sus camionetas en áreas de acotamiento, no importa que sea raya amarilla, cargadas de frutas, verduras, etc., a fin de sacar jugosas ganancias, sin que sean molestados por las autoridades de tránsito, ni mucho menos por inspectores de reglamentos.
Debido a que las vialidades miden menos de 12 metros de ancho, especialmente esquinas y por los alrededores de la plaza de El Pitillal, algunos autobuses del transporte público, por lo regular tienen problemas para circular.
Por lo regular en las banquetas exhiben mercancía, ocasionando que el peatón no tenga la libertad de caminar con mayor comodidad, sino que al contrario está obligado bajar de la banqueta, corriendo el riesgo de ser atropellado por algún vehículo.
Por la motivo, en su mayoría de las personas que entrevistamos coincidieron que ojalá que través del inspectores de reglamentos, se busquen reordenar a pequeños comerciantes que obstruyendo las vialidades y banquetas por el centro histórico de El Pitillal.
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