Luego de que elementos de la Fiscalía General del Estado de Nayarit arrestaran con orden de aprehensión al abogado Jesús Iván “P” en Amatlán de Cañas, por el delito de abogados patronos y litigantes, falsedad en declaraciones y asociación delictuosa, algunas víctimas rompieron el silencio y dieron a conocer cómo fueron despojadas de sus patrimonios.
“Ese licenciado Plata nos dio hasta por debajo de la lengua, muy listo, pero para fregarlo a uno, nos subieron a buró de crédito ya de deber poco nos subieron al triple”, explicó Ramona, quien aseguró que le quieren quitar su casa, “yo me enferme, porque con muchos sacrificios nosotros formamos esa caja”.
Las autoridades continúan realizando las averiguaciones en contra de la “Sociedad Financiera de Amatlán de Cañas”, en los casos también están implicados licenciados, abogados y notarios.
“Me embargaron mi casa, pedí un préstamo de 120 mil pesos para pagar unas deudas de mi padre, ya no me dio chance de negociar, me rechazan la posibilidad de pagar y me metió el embargo, después me hizo otros juicios hereditarios y me hizo lo mismo, tuvimos un convenio en el juzgado y como que compraba las leyes o no se que hizo que me acusó de despojo y daño en propiedad ajena, las tierras eran de mi padre y de ahí para acá ya no pude recuperar nada, ya me metí a trabajar a mis tierras porque me dijo el señor juez, me metí y a los dos años me cayó una orden de aprehensión, caí a la cárcel bajo fianza”, explica el señor Arnoldo.
También afirmó que fue amenazado por parte de Jesús Iván de muerte en el Ministerio Público, “ahí tengo un pistola en el carro” le dijo el litigante.
Las denuncias en contra de Jesús siguen aumentando, pues se presume que son cientos las familias afectadas, quienes poco a poco han perdido el temor y se han atrevido a denunciar para recuperar sus pertenencias.
Otro de los relatos es el del señor Efraín, a quien le elevaron su pequeña deuda en 300 mil pesos, y le entregaron unos papeles para que los firmara, percatándose que esos documentos eran para quitarle su hogar, a los días fue a revisar los papeles de otro terreno que tenía y la sorpresa que se llevó es que ya tenían otro nombre, “que yo fue a firmar la compraventa a Michoacán y yo no se para allá, ósea, ¿cómo estuvo eso?.
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